La escasez de harina a precio subsidiado a causa de la disminución de la actividad en los molinos, debido al conflicto que siguen manteniendo con el Gobierno, tiene un índice más preocupante en el interior de la provincia. En la mayoría de las localidades ya no se registran panaderías que puedan vender el kilo de pan por menos de 6 pesos y en muchos casos ya se encuentra por encima de los 7,50 y hasta ocho pesos el kilo.
Mientras en la Capital, en los barrios el producto no supera los $5, en las panificadoras del centro ronda entre los $6 y los $6,60 según adelantó ayer a época el presidente de la Asociación de Panaderos de Corrientes, Juan Vambakianos.
Uno de los mayores problemas constituye la falta de control a los precios ya que cada panadería estipula un costo de venta al público en base a sus gastos. “Nosotros no somos un ente de contralor, no existe en la provincia quien controle el incremento de los precios y cada panadería va regulando sus valores en relación a los costos que recibe por la materia prima”, explicó el referente panadero.
En tanto, a través de un sondeo que realizó época por distintos comercios del rubro del interior, la mayoría de sus dueños aseguró que hace una semana atrás ya incrementaron el precio del kilo de pan debido a que no se consigue harina y otros indicaron que la semana próxima podrían volver a subir un tanto más de no mejorar la situación.
“No tenemos harina, tenemos que andar mendigando para conseguirla”, recalcó Elba, dueña de la Panadería Don Antonio de la localidad de Santa Lucía. Indicó que hace dos semanas ya debió aumentar el precio del kilo de pan a $7 mientras que antes lo ofrecía a $5. “Antes ofrecíamos un solo tipo de pan, ahora tenemos uno a $5 (el más barato) y el miñoncito, flautín y otros a $7”, explicó la mujer.
Por su parte, desde Panificación “El chamigo”, de Monte Caseros indicaron que “hasta el momento tenemos a $4 el kilo pero ya es imposible sostenerlo a ese precio por lo que el lunes estamos por subir a $5”. Agregaron así que en esa ciudad es una de las únicas panaderías que aún mantiene ese valor ya que “la mayoría hace 15 días empezó a incrementar a $6, incluso en otras localidades como Curuzú Cuatiá o Juan Pujol ya lo venden a $7”.
En tanto Mari, la dueña de la Panadería “San Martín” de Esquina indicó que desde el lunes está vendiendo el kilo de pan a $7 “e incluso hay panaderías acá que ya lo ofrecen a $8. La situación es complicada porque no nos está llegando harina, la que nos llega es muy cara, la bolsa la estamos pagando a más de $92”, sentenció.
De esa manera, el panorama no es alentador y al parecer el conflicto entre los molinos y el Gobierno continuará aún a lo largo del mes.
