viernes, 21 de enero de 2011

Un grupo de correntinos cruzará los Andes

El 15 de enero, realizando el 14º Cruce de los Andes a lomo de mula, tres correntinos, uno de sangre y dos de corazón, salieron desde Mendoza y rumbo a Paso de los Patos, siguiendo los caminos del grueso del Ejército de los Andes, columna que iba al mando del General Don José de San Martín. Se trata de Alfredo Duarte, Guillermo Juarez Touceda y Luis Nakaganeku, socios de la Asociación Correntina General San Martín de Buenos Aires y quienes junto con la Asociación Cultural Sanmartiniana “Cuna de la Bandera” realizarán un nuevo cruce, que esta vez los llevará al límite con Chile y será para ellos el segundo viaje, ya que el año pasado realizaron el periplo entre Uspallata y el Cristo Redentor.

Según informó María Cristina Dufour de Otamendi, “el recorrido que abarcará diez días, con la carpa y sus pertenencias sobre la mula será: de Mendoza a Alvarez Condarco en micro, etapa ya cumplida el día 15; de Alvarez Condarco a Manantiales en una jornada de 7 horas de marcha a lomo de mula; de Manantiales a Soler en 6 horas de marcha.

El cuarto día, después de una marcha de 10 horas llegarán a Sardina, en una jornada de mucho esfuerzo donde el cansancio se hace sentir, pues hay que estar muy atento al laberíntico camino que se transita.
Descanso y vuelta a la marcha de 10 horas para llegar al límite fronterizo y después de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, si la emoción deja emitir sonido, regresarán al campamento para desandar el camino.

Con la satisfacción del deber cumplido comenzará el regreso, nuevamente, 10 horas sobre la mula los llevarán a Soler, Manantiales y Álvarez Condarco.

El décimo día, llegarán a Uspallata para reunirse con la columna que subió al Cristo Redentor y compartir la cena de cierre. Pero sus vidas ya no serán las mismas, todos hemos cambiado algo.

Desde el momento que nos inscribimos, en la página de la Asociación: www.crucedelosandes.com.ar hasta el fin de nuestros días, llevaremos marcada en el alma, la dicha inmensa de haber realizado parte de la hazaña que hiciera nuestro Gran Caraí y convertirnos en damas y caballeros de los Andes; expedicionarios de los Andes.

No nos da ningún rédito, pero sí el orgullo y la satisfacción de haber transitado por las huellas de esos correntinos que abonaron con sus huesos y su sangre la tierra de América para darnos la libertad.

Siempre Corrientes se hace presente en los cruces y aún no habiéndolo hecho con ellos, nos une una gran amistad con los expedicionarios Elpidio González de Saladas y Carlos Molina de Santo Tomé, a quienes conocimos en encuentros posteriores a la realización de su cruce, también quienes siempre nos acompañan para hacernos reponer nuestras energías mediante una rica y caliente comida son el suboficial Becerra y su hijo de Curuzú Cuatiá, porque ya todos formamos una familia muy especial, somos sanmartinianos, para aprender con su ejemplo, y vivir según sus principios”, precisó.